carrozas. vista del museo
Barcelona lugar a lugar

Colección Carrozas Fúnebres, Barcelona (España)

La Colección de Carrozas Fúnebres es un ejemplo de la evolución del entierro en Barcelona y en Europa. Barcelona nos ofrece una curiosa muestra de como eran los entierros hace unos siglos.

No sabíamos de su existencia, pero buscando información sobre el Cementerio de Montjuïc vimos este curioso museo.

Queda justo en la entrada del Cementerio de Montjuïc, vamos, nosotros nos lo pasamos de largo sin querer. Se puede aparcar cómodamente delante. Además, si vas en domingo puedes visitar el museo y hacer la visita guiada al cementerio (nosotros lo hicimos).

Siempre nos pasa alguna cosa, y ese día no fue una excepción. Veréis que las fotos son algo oscuras, ya que el museo estaba sin luz (tendremos que volver).

La Estufa

Al entrar lo primero que nos recibe es esta majestuosa carroza atada a sus caballos. Parece que tengan que salir del recinto.

La colección de carrozas fúnebres nos ofrece visitar 13 carrozas originales, 6 carruajes de acompañamiento y tres coches a motor.

Su construcción data des de finales del siglo XIX hasta el siglo XX. Todas tienen una historia que contar, la cual podemos ver el panel que las acompaña (en catalán y castellano).

Nos muestran varios estilos y también estatus sociales:

La Gran Doumont. Esta inspirada en los modelos franceses del siglo XIX.
Carroza ligera de estilo vienés. Se utilizaba en servicios de lujo
Gótica. Utilizada en la década de 1950 para entierros de gran lujo
Coche usual. Llamado popularmente araña. Se utilizo a finales del siglo XIX.
Blanca. Es la única replica. Está construida con las piezas antiguas de unas originales en 1970.
Angélica oro y plata. Construida en la Barcelona de 1935, de estilo barroco.
Coche blanco de lujo nº 3. Se hicieron varios modelos
Landau. también se la llamaba Manola. Era de las más caras y se utilizaba en toda Europa. Es una bonita carroza de acompañamiento.

Todo esto son ejemplos de los modelos que puedes ver. Estarás un buen rato para mirarlas todas y saber un poco de cada una.

También nos enseñan una exposición de trajes de la época.


La nueva era, a motor

Nos sorprendió ver un altillo. En el tienen 3 coches a motor. De los primeros que formaron parte en entierros.

Hispano Suiza. Construido en Bcn en 1920. Fue el primer vehículo a motor en realizar un servicio en Barcelona.
Buick Riviera Special. Bonito modelo americano de 1958. Eran difíciles de exportar.
Studebaker six. Este coche también es de origen americano. Fue de los primeros en circular por las calles de Barcelona

Como podéis ver hay para todos los gustos. Una visita que nos hace retroceder en el tiempo y ver la muerte de otra forma.


Un poco de historia de la Colección de Carrozas Fúnebres


La Colección de Carrozas Fúnebres de Barcelona se expuso por primera vez en 1970 y a principios del 2013 se traslado al Cementerio de Montjuïc, Barcelona.

Esta única e increíble colección de carrozas nos cuenta como ha evolucionado la forma de enterrar a los nuestros y de entender a los muertos en los últimos siglos.

Para entender su evolución tenemos que ir unos años atrás y ver como se enterraba en antaño a la gente.

Para ellos tenemos que contar la historia de Barcelona, des de el siglo XVIII hasta principios del siglo XIX.

Tenemos que pensar que Barcelona antes era una ciudad amurallada, que creció con el comercio con las américas. En ese momento, cuando una se moría, se le enterraba al lado de la iglesia, en un foso parroquial.

Con el crecimiento de la ciudad, los foso no daban el abasto, por lo que se tubo que pensar una solución al problema.


El primer cambio

El obispo de Barcelona, Josep Climent i Avinent, convenció a las autoridades de la ciudad de crear un cementerio fuera de las murallas. El primero se creo en 1775 (el que es ahora el cementerio de Poblanou).

Este hecho no gusto mucho a los barceloneses. Por lo que se le tubo que dar otro uso. En sus inicios eran donde se depositaban las exhumaciones y se enterraban a los pobres que morían en el Hospital de Santa Pau y Santa Creu. En 1813 fue destrozado en la Guerra del Francés.

Pasada la Guerra del Francés Barcelona se transformo en todos los sentidos. La economía seguía creciendo y la ciudad también.

Debido a estos cambios sociales el obispo Sitjar construyó un cementerio a las afueras de Barcelona, en unos terrenos de la iglesia.

Para el proyecto se contrato al arquitecto Antoni Ginesi para que adecuara el recinto a las nuevas necesidades funerarias pero que también se respetaran las tradiciones.


Ahora sí

Esta vez todo funciono, y con el cementerio se creo un nuevo oficio, el de portadores de difuntos.

En 1835 hay otro cambio. Los cementerios pasan a ser de propiedad municipal, y el alcalde de ese momento, Josep Maria de Cabanes obligo a utilizar las carrozas para los entierros.

Esta idea no gusto mucho, lo que provoco saboteo en los primeros entierros con carrozas.

El primer carruaje que realizo un entierro en Barcelona, salio de la Parroquia de Sant Cugat del Rec en dirección al cementerio de Poblanou. Eso fue en 1836.

Todo lo relacionado con los entierros cambio en ese momento. Se creo todo un oficio a su alrededor y uno fue el de construcción de carrozas fúnebres. Des de las más sencillas, para los que no tenían tanto dinero, hasta las más lujosas para nobles y reyes.

Entrada a la Colección de Carrozas Fúnebres de Barcelona

Información práctica


¿Cómo llegar?

Es muy fácil de llegar y tienes el aparcamiento justo delante del recinto. Nosotros vinimos por la ronda litoral y nos saco directos, pero también se puede ir en transporte público.


Más información

La entrada es gratuita. Abre los sábados y domingos de 10:00 a 14:00 h. Los sábados te ofrecen la posibilidad de una visita guiada, gratuita, por el museo.

El cementerio de Barcelona nos ofrece un apartado totalmente dedicado a esta Colección de Carrozas Fúnebres que nos amplia la información de su historia y todo lo relacionado con la colección.


Localización

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